quien pudiera desatarte las manos señor mio de la sentencia.
Pero no serias tu,sin tu corona de espinas y sin tus manos atadas,
sin que nadie te lea la sentencia,esa sentencia de muerte.......
Cual sentencia pilatos se lavaría las manos,para no ser culpable
de tu muerte.
Señor al amor y por amor tu moriste por nosotros.
¿Que persona en el mundo aria eso por nosotros?
¿Quien puede aguantar ese peso de la cruz y morir en ella?
Moriste por nosotros y para nosotros,y no te lo agradecemos,
señor mio,que poco pensamos todos lo que hiciste por nosotros.
Cuantas cosas tu y tu madre hacéis por nosotros y no lo vemos,
solo pedimos para nosotros y no para otras personas que lo necesitan.
A día de hoy a poca gente se le dicta la sentencia a muerte como a ti,
pero la vida la dicta en las camas de los hospitales aquellas personas
que sufren enfermedades a causa de enfermedades por todos conocidas.
Enfermedades que no conocen de edad,ni de genero ni de tipo de persona.
Por todos ellos señor ayúdales.
Daniel Gomez Butrón
1 comentario:
Sentimiento puro y devoción.¡Bien butron!
Publicar un comentario